El gato y la chica

El gato y la chica

Una pieza linda y delicada, una camiseta que puede lucir en cualquier situación, un highlight para su fondo de armario.

Up on the bridge

Up on the bridge

The bridge no es una película fácil de justificar. Dos cámaras fijas graban durante un año el Golden Gate registrando todo lo que ocurre en un lugar que atrae a muchos turistas, unos para contemplar la ciudad y otros para arrojarse a la niebla que separa el puente de la bahía de San Francisco.
La reacción es pensar que es una ocurrencia de lo más oportunista pero su director la defiende como un si fuera un intento de entender las causas que pueden incitar a una persona para cometer este acto tan dramático, y complementa el documental con un extenso trabajo de investigación que incluye entrevistas a médicos, familiares y amigos de los suicidas. Todo muy interesante pero sigue siendo morboso y además debe dar más mal rollo que leer Plataforma*.
El trailer se puede ver el la web del Festival de Tribeca y es muy inquietante, porque los protagonistas se integran a la perfección con el ambiente pero no son parte de ninguna ficción, y sobretodo por la posibilidad de apreciar en plano corto el último gesto de alguien que va a morir. Y luego dicen que Babies for Gina va a ser un cortometraje denso.

Un deseo

Un deseo

Mañana, en lugar de despertarme con la alarma del móvil, quiero que Stuart Staples me cante una canción de buenos días. Y si en su repertorio no hay ninguna que sea adecuada (entiendase por medio alegre), que se la invente.

Legión de chaperos

Legión de chaperos

No es que el personaje de Brian kinney se esté apoderando de mi persona sino el título remite a una canción que hoy, después de mucha acumulación de circumstancias y database errors, he encontrado en el myspace. El grupo se llama Rajoy División (conste que a mi me ha hecho mucha gracia pero me imagino la cara de una que yo me sé) y recuerdan a todas las bandas post "Blas y las astrales" o sea, que tocan y cantan poco y hacen canciones inspirados en la prostitución en cualquiera de sus variantes o en temas de costumbrismo urbano tipo te he visto robando en el carrefour. También son de lo más vanguardistas, si Trent Reznor grababa el sonido de una cámara polaroid y George Michael parecía que enchufaba el módem, Rajoy Division van un paso más allá y tienen unas bases que evocan al timbre de casa de la abuela. Esto me pasa por leer horóscopo de 20 minutos, que decía que me desconectase de la realidad.

Bricollage

Bricollage

Montar, desmotar, pegar o amartillear nunca ha sido lo mío, ni siquiera conseguí forrar una carpeta decentemente en mi vida. Estamos de reformas y necesitamos que alguna alma caritativa nos preste una sierra eléctrica, que yo no pienso utilizar así que también estamos precisando de algún/alguna valiente que se anime a destrozar armarios.

Larita producción! envíanos alguno de tus amigos que salen en las fotos con cara de psicópatas, y antes de que preguntes te aviso que ahora el salón está repleto de luz y color.

Vamos a la playa

Vamos a la playa

No sé si los trabajadores de Iberia tenían razón con sus reclamaciones, pero desde luego la perdieron con la huelga del pasado fin de semana. Stjarna fue una de las damnificadas, y aunque no he entendido si llegó al concierto de Depeche Mode/ The Raveonettes en San Sebastian, nadie le quita una jornada en el aeropuerto que ninguein merece. Así ocurrió con miles de personas pero destaca el caso de unos franceses (creo) que volvían de Ibiza (o cercanías) con el ferry rápido de Transmediterranea. Se produjo un fallo eléctrico y se quedaron 15 HORAS a la deriva, sin aire acondicionado y encerrados porque el barco sólo dispone de una claustrofóbica cabina interior. Finalmente se dignaron a rescatarlos, llegaron a Barcelona a las tantas y se encontraron seguido con toda la movida del aeropuerto. Cuando los entrevistaron, ya no tenían fuerzas ni para quejarse.
Un poco más al sur, en Valencia, han desaparecido 400 KILOS de coca incautados en una comisaria. Cuatrocientos kilos, que se dice rápido. Y por ahí abajo, en ese paraíso del mármol blanco, el oro y la corrupción que es Marbella, parecía que el panorama no podía empeorar cuando Yola Berrocal anunció que se presentaba a alcaldesa. Debe ser más correcto pensar que "tiene la intención" pero previsora ella y siguiendo su linea de pensamiento (plano) ha encontrado un nombre de lo más adecuado que es Y.I.L, variación de G.I.L que viene a significar Yola Independiente Liberal.

"Su objetivo fundamental es el bienestar de las personas, quiere gobernar para el pueblo y promete honestidad más transparencia. Pretende poner gimnasios en las playas y montar unos Oscar y unos premios de la música tipo Grammy.
También propone operaciones de aumento de pecho gratuitas. Aunque parece que el mayor interés de Yola como dueña de bar, es que no le cierren el local a las tres de la mañana. O a las cuatro, los fines de semana."

La mayor parte del tiempo pensamos que la chica tiene el cerebro del tamaño de un guisante pero de pronto se me antoja más lista que nadie. Teniendo en cuenta que, como escribió Bob Pop, es una señora que se hizo famosa porque un cura - con más pluma que un concierto de Kylie Minogue en el LoroPark - le metió mano por debajo de la mesa en un VIPS, mal no le va.

He conocido a Dios y se llama Brian

He conocido a Dios y se llama Brian

No se puede, si hay un programa en la historia de la televisión que me ha parecido inmoral (dejando aparte el momento awful plastic surgery de Loli Alvarez en Crónicas Marcianas) es el de los chicos del coro o el coro de la cárcel o como se llame. En realidad no puedo hablar mucho del tema porque he aguantado treinta segundos por programa pero fueron suficientes.
El primer día les hicieron cantar lo de "libreee, como el sol cuando amanece yo soy libreee". Hay que ser hijo de puta. Para empeorar la estampa se escucha una voz en off en tono dramático-festivo y sale siempre una profesora toda happy que parece que se toma una sobredosis de prozac para encarar el reto. Una vez hablaba con un recluso tipo yonqui sin dientes y le preguntaba si podía llegar a tal nota cuando el pobre hombre no podía ni hablar. En otra ocasión daba una clase magistral a una habitación casi vacía, les anunciaba emocionada que para la próxima semana les ha tocado una de estoooopaaaa. Los alumnos ni se inmutaban.
La culpa es de esta Leire, que con la tontería no se pierde un programa aunque yo mejor me callo, que llevo tres semanas viendo Queer as Folks.